IA como herramienta de control
Las finanzas suponen el núcleo de las compañías, ya sea para su gestión interna o como servicio. Esto hace que, tradicionalmente, se haya trabajado con métodos matemáticos, estadísticos y econométricos con el fin de prevenir fraudes, gestionar el riesgo financiero o prever la rentabilidad de una inversión. A medida que la capacidad computacional ha ido evolucionando, estas técnicas clásicas han sido complementadas e incluso sustituídas por modelos de Inteligencia Artificial que, con menor intervención humana, logran resultados nunca antes imaginados.